Esta es la información que nos ha enviado una amiga desde allí y sus necesidades:
- La escuela está situada en un barrio deprimido de Guayaquil,
Ecuador, y tiene 50 alumnos.
- El 50% de los niños son hijos de madres solteras jóvenes menores de 30 años.
- El 80% de padres y madres se dedican al trabajo informal (venta
ambulante sobre todo)
- El 70% de padres y madres no han terminado la primaria.
- El 90% son jóvenes de 22 a 35 años, por las citas familiares que
realizamos vemos que estos padres y madres vienen con una historia familiar de maltrato, abandono, carencia afectiva y es lo que repiten con sus hijos-as.
-Hay algunos niños que requieren especial atención porque son
agresivos , introvertidos, maltratados o con alguna lesión cerebral.
- De los cuatro maestros que trabajan allí, una profe recibe sueldo
del Ministerio de Educación y los otros lo hacen de forma voluntaria.
Además de su formación como maestros, todos han sido formados durante varios años en el Pestalozzi y este es el método que desarrolla en la escuela.
- Los niños toman un lunch (jugo, frutas, empanadas, tortillas, etc)
preparado en la escuela para evitar que traigan comida chatarra.
- Por la observación y la edad de los niños se preparan los
ambientes, que intentamos que sean ricos en materiales. Las familias aportan parte de su tiempo y conocimientos a la escuela: cosen los disfraces, pintan una estantería, arreglan una mesa, etc.
Tenemos ambientes de: manualidades, de agua, arenero, motricidad gruesa (pelotas, aros), juegos y legos, construcción, rompecabezas, pintar, juego representativo (cocina, disfraces, música), ensartar y cuentos.
Los ambientes sirven para que los niños cada día tomen la decisión de lo que quieren hacer con autonomía y responsabilidad.

Hay reglas que sirven para un ambiente de buenas relaciones entre todos los que convivimos allí (niños y adultos).
La escuela se apoya en bases científicas de Piaget, Montessori,
Janov, etc. y de los descubrimientos en neurología para comprender mejor a los niños.
El horario es de 7:00a.m. a 3:00 p.m. Cuando los niños se van a su casa, los maestros realizan las citas familiares que consisten en una reunión con papá y mamá para conversar de su hijo. Estas citas son para que nos conversen desde el momento en que su hijo-a ha sido fecundado, cómo es el niño en casa, como es tratado por sus padres, cómo es el entorno del niños fuera de la escuela. Los maestros cuentan a los padres cómo es el niño-a en la escuela, cómo se relaciona con los demás, porqué vemos ciertas actitudes en el niño que nos llaman la atención (pega, desordena, grita, se orina, etc).
Todo esto se hace no para hacer sentir mal a papá y mamá sino para ver como tanto ellos como nosotros tenemos que apoyar al niño. Los papis y mamis se comprometen a una relación diferente con sus hijos (respeto, atención , contacto físico, contarles cuentos en la noche, salir a espacios abiertos los fines de semana, no gritarles, no burlarse de ellos, etc.)
Estás citas se hacen durante todo el año lectivo y se les da
seguimiento para ver si los padres están cumpliendo con lo que se han comprometido.
Hay otra reunión que es la general con todos los padres y madres para tratar un tema específico que es una vez al mes.