El salón de plenosdel Ayuntamiento pejino ha acogido la presentación de las líneas maestras de una edición que traerá, como principal novedad, la posibilidad de disponer de las modernas instalaciones del puerto más moderno de cuantos se extienden entre Baiona (Pontevedra) y La Rochelle (Francia). Con el alcalde Ángel Vega como anfitrión, en el acto han tomado parte el consejero de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, Eduardo Arasti; el director general de Editorial Cantabria, Manuel Campillo; el director de Marina de Laredo, Antonio Bocanegra; la responsable del Salón Náutico y del Mar, Nieves Fernández; el presidente del Real Club Náutico de Laredo, Juan Ignacio Echevarría; el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de Laredo, Braulio López; el regatista de fama mundial Toño Gorostegui; y los concejales de Turismo y Festejos y del Mundo de la Mar, Laura Recio y Ramón Arenas, respectivamente.

El alcalde, Ángel Vega, se ha mostrado convencido de que el nuevo puerto, de la mano del turismo náutico, “va a permitir que Laredo vuelva a recuperar el liderazgo que antaño tuvo en el mundo del mar”. En este sentido, ha recordado la estrecha ligazón de la villa con la mar y ha definido el salón como “una apuesta decisiva para dar a conocer nuestra villa y potenciar su desarrollo”.

Por su parte, el consejero Eduardo Arasti se ha mostrado “encantado” con la elección de Laredo y ha apostado por “convertir la tradición pesquera y la belleza paisajística” en una fuente de riqueza. Tras dar la enhorabuena a todos los involucrados en su puesta en marcha, y sobre todo “a quienes lo han soñado”, ha recordado que servirá para poner en valor el atractivo náutico de una región que en el año 2014 acogerá el Mundial de Vela.

Manuel Campillo, director general de Editorial Cantabria, editora de El Diario Montañés, ha celebradoel embarque de su grupo mediático “en esta aventura estupenda” y ha coincidido en que “Laredo es un sitio ideal”. Asimismo, ha señalado que “estamos implicados hasta el final con este Salón Náutico” y se ha mostrado convencido de que “tiene que salir bien. Toño Gorostegui ha destacado las inmejorables condiciones de Laredo y su bahía para los deportes náuticos y ha hecho un llamamiento para impulsar la industria vinculada a este importante sector.


Salón flotante
La responsable de la organización, Nieves Fernández,ha desgranado los pormenores de un evento que dará el pistoletazo de salida a la temporada estival de Laredo. La cita prevé atraer a alrededor de 100.000 visitantes procedentes de distintos puntos geográficos, aprovechando que en un radio de 50 kilómetros se encuentran Santander y Bilbao, en un área cuya población supera el millón y medio de habitantes.

Esta situación estratégica permitirá poder descentralizar la oferta ante un público diferenciado, lo que redundará en una mayor satisfacción para los expositores y visitantes de la feria. Un de las novedades llegará de la mano de la posibilidad de disponer de un salón náutico flotante. Se organizará un mercado de segunda mano, que convertirá al puerto en el lugar clave para todos aquellos que quieran vender su embarcacióno material náutico. El posible comprador se encontrará con la mayor oferta flotante de barcos usados con precios realmente competitivos; y el vendedor podrá atracar su barco a un precio muy atractivo en el puerto de Laredo. Los expositores se ubicarán tanto en la Marina Seca como en su exterior.

De manera paralela, se prevé desarrollar eventos como una regata con ambición de congregar a la flota más importante del Cantábrico; un Campeonato de Paddle Surf de nivel internacional; o un Open de Pesca de altura en colaboración con la Federación Española de Pesca. Asimismo, se está trabajando en la organización de un campus dirigido a jóvenes estudiantes en colegios de toda España que acudirían en estas fechas a Laredo atraídos por la posibilidad de practicar actividades náuticas. Finalmente, otro de los pilares será el gastronómico, con una muestra que permitirá poner en valor la gastronomía y cocina del mar, con la posibilidad de fomentar un encuentro de cocineros vascos y cántabros.